En declaraciones a medios locales en la capital de Serbia que reprodujo Básquet Plus el ex Dallas Mavericks de la NBA resaltó que se siente “feliz de estar aquí, con este equipo y este entrenador (el prestigioso montenegrino Dusko Ivanovic). No veo la hora de ponerme ya la camiseta rojiblanca y empezar a jugar”.
“Nikola Jokic (el serbio que fue compañero suyo en Denver Nuggets) y Luka Doncic (el esloveno con el que compartió equipo en Real Madrid y los Mavericks) me ayudaron mucho para llegar aquí”, reveló.
“Jokic me habló más sobre Belgrado y me ayudó a elegir el mejor lugar donde vivir, y Luka me escribió para felicitarme, me dijo que se siente feliz de que yo viniera aquí”, comentó.
Pero su mayor agradecimiento apuntó a su compañero en el seleccionado argentino, el marplatense Luca Vildoza, con el que habló “un poco antes de firmar, y mucho luego de confirmar mi arribo. Fue una de las razones por las que estoy acá; ver como él readaptó su juego a la Euroliga, al básquetbol FIBA, después de pasar por la NBA (New York Knicks y Milwaukee Bucks). Es que tener un amigo como él acá es muy importante”.
“El otro día vi como lo ovacionaron cuando jugó contra el Zalgiris Kaunas (de Lituania) y fue una locura. Se me puso la piel de gallina y terminó por decidirme a venir aquí. Está jugando a un nivel altísimo y la gente lo ama”, remarcó.
“La posibilidad de volver a Real Madrid no fue concreta y por eso estoy en estrella Roja, con el que firmé por dos temporadas y espero cumplirlas hasta el final”, concluyó el ex Peñarol, de Mar del Plata, que puso todo para seguir en la NBA pero no le fue posible, y ahora emprende una nueva aventura profesional en Serbia.