Y no solamente eso, el ciclobol, cycle ball o radball está regulado por la Unión Ciclista Internacional (UCI) bajo el término “indoor cycling”. Además cualquier ganador mundial porta el afamado Maillot Arco-Iris. Dicho deporte es furor en países como Alemania, Suiza, Austria, Bélgica, Republica Checa y Japón.
Los campeonatos mundiales comenzaron a regir desde 1929 bajo el aval de la UCI. Un dúo conocido en esta asignatura son los hermanos checoslovacos Jindřich y Jan Pospíšil que fueron los máximos poseedores del título mundial entre 1965 y 1988. Algo así como los brasileros del ciclobol.
El deporte se realiza sobre un parqué muy similar al de fútbol sala, sobre el cual hay dos pares por lado. El objetivo es convertirle al otro equipo con un balón de casi 18 cm de diámetro con un peso que oscila entre los 500 y 600 gramos.
Durante el juego solo un “cilclista-jugador” puede estar en el área a modo de portero y usar las manos. El tiempo estimado de cada partido varía: hay dos tiempos de siete minutos para los profesionales.
