Este jueves un alumno del IPEC 181 Brigadier Cornelio Saavedra, ubicado en las calles Álvarez de Arenales y La Plata, llevó un ejemplar de una serpiente de coral, la cual es una de las especies más venenosas que viven en Córdoba. El joven la había encontrado en su casa, la colocó en un frasco y la llevó al colegio para mostrársela a sus compañeros y a la encargada del laboratorio.
Sin embargo, la presencia del animal prendió las alarmas de las autoridades, quienes decidieron llamar al 911. Al apersonarse a la institución educativa, la Policía resolvió llamar a la Patrulla Ambiental para que retiren al reptil. Finalmente, quedó en manos del Centro de Zoología Aplicable ubicado en el Parque de la Biodiversidad.
El Comisario José Quevedo, Jefe de la División Patrulla Ambiental de Córdoba, dijo a Vía País que nadie fue atacado por la serpiente de coral, pero que su mordedura es peligrosa y puede llegar a ser letal.
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