Por Ricky Vazquez
Andrés Fassi tiene esa tranquilidad que probablemente se la de la experiencia en llevar todo hasta el límite del más defensor de su gestión. Al margen de lo que la prensa “genere” como manifestó el propio presidente en la previa del clásico, muchas veces la prensa hoy rescata las opiniones de los propios hinchas en las redes sociales.
Hace unas décadas a los periodistas se les pedía que caminaran la calle para saber que pensaba la gente. Hoy tenemos una muestra, mucho más fidedigna que cualquier encuesta política, en las redes sociales sobre qué piensa la gente en un determinado tema siempre haciendo alusión a los perfiles reales, no a los huevitos, y logrando discernir entre las críticas injustificadas y los comentarios puros.
El resultado en el clásico muchas veces suele ser anecdótico y hasta intrascendente cuando se trata de un amistoso, pero en este caso fue clave para calmar el presente en el mundo Talleres. Fue cómo una pastilla de no desesperar que las cosas van a estar bien. Incluso fue Fassi quien recordó lo difícil que fue el 2020 y como terminó. Si otra virtud tiene el presidente de la T es que cuando se vive una aparente crisis que para muchos parece existencial casi que él no lo demuestra y siempre sonríe públicamente.
En las últimas horas se anunció la llegada de Zalazar desde Argentinos Juniors, mientras que Portillo y Sosa están al caer. Tres refuerzos con experiencia, a pesar de su juventud, en la misma liga profesional.
Después llegarán seguramente juveniles de River y San Lorenzo por las salidas de Enzo Díaz y Rafa Pérez, otra virtud fue la de no seguir tirando de la soga en caso de jugadores que ya cumplieron su ciclo en la institución y se terminan transformando en un problema. Y eso que a muchos los convenció de jugar uno o dos años más de lo que hubiesen hecho cómo hoy pasa específicamente por ejemplo con Diego Valoyes.
El presidente vuelve a poner sobre la mesa toda su sabiduría y sabe cuándo tiene que gastar el dinero para hacer un equipo fuerte. A diferencia de otros mercados, Talleres compró porcentajes de pase de jugadores para generar su llegada e incluso la mayoría de los casos que están por llegar también será de la misma manera.
Talleres compró a Depietris, el 50% de Zalazar, al caer Portillo adquiriéndole el 70% de su ficha, en la misma situación el delantero paraguayo Sosa por otro 50% y se habla de Costa de Independiente por una suma cercana al millón y medio de dólares, como todas las negociaciones. El Matador habrá invertido cerca de 5 millones de dólares en este mercado de pases sin contar lo que le entrará en dinero y canje de jugadores que salen del plantel.
Se viene un nuevo Talleres y Fassi otra vez parece haber surfeado la ola de la impaciencia para volver a calmar las aguas con una nueva versión del equipo que arrancará la temporada el próximo sábado ante Independiente en el Kempes.
