Por Gustavo Bee Sellares (@gusbeesellares)
Instituto se ha caracterizado en los últimos años en tener en sus planteles jugadores norteamericanos muy rendidores como el caso de San Clancy jrs o Rodney Green: jugadores de rol con funciones muy específicas, tanto en defensa como en ataque.
Pero en el último año, la dirigencia puso el ojo en el venezolano Néstor Colmenares. Con sus 2 metros 3 cm y jugando de ala pivot le dio cierta jerarquía a los ataques de la Gloria desde el primer partido , cuando debuto contra Atenas , en el inicio de la Competencia. Sus números están más que claros, 11 puntos por partido en 26 minutos en el rectángulo de juego.
Además de ser el mejor rebotero con 10, 7 de ellos en defensa, conformando junto a Juan Ignacio Alessio y Pablo Espinoza como las torres del equipo. En total disputo 17 juegos con los de Alta Córdoba, siendo el segundo goleador por detrás de Martin Cuello.
Uno de sus grandes juegos fue en el triunfo del equipo del Sepo Ginobili ante Libertad por 96 a 81 con un Colmenares determinante: esa tarde fue doble figura: 13 puntos con 11 rebotes, en 27 minutos. Grandes números para un jugador que ya es un referente del plantel.
Si bien Instituto transito la parte final del año pasado de forma muy irregular, Colmenares fue el jugador que más le rindió al entrenador con sus diversas variantes de ataque y defensa, tanto en tiros de media cancha como a la hora de cargar los rebotes.
Hoy en día a poco del reinicio de la Competencia, la Gloria transita la cuarta posición en la tabla con récord de 13-6, pero con un Colmenares que seguramente le seguirá dando más alegrías al equipo de Alta Córdoba.
