Por Matías Candoli
Sin dudas que se podría decir que, como el 19 de junio es el día del hincha de Instituto porque en esa fecha se dieron los ascensos del ‘99 y el 2004, tranquilamente el 24 de mayo debería ser el día del hincha de Atenas.
Fue en el mismo día, primero en 1998 y luego en 2009, que el Verde de barrio General Bustos consiguió dos títulos de Liga Nacional de los nueve que ganó en su historia.
El 24 de mayo de 1998 la serie final ante Boca estaba 3 a 0 a favor del Griego. El Xeneize eligió el Luna Park para jugar sus partidos de local. Los dos partidos en el Cerutti, en la capital cordobesa terminaron 89 a 87 y 103 a 88, siempre a favor de los dirigidos por Rubén Magnano.
En el tercero, el primero en Buenos Aires, el equipo de Marcelo Milanesio, Héctor Campana, Bruno Lábaque, Fabricio Oberto, Steve Edwards, Diego Osella y Leandro Palladino, entre otros dejó las cosas match point por 96 a 87.
En el cuarto juego había 7 mil personas que fueron testigos de una noche inolvidable para el basquet nacional. Con un Oberto imparable que metió 37 puntos y diez rebotes y con Milanesio manejando los tiempos de cada ataque ateniense, el equipo cordobés controló las acciones de principio a fin.
Se terminó imponiendo por un categórico 111 a 90 generando el reconocimiento de todos los concurrentes al palacio de los deportes ubicado en la esquina de Corrientes y Bouchard de la ciudad de Buenos Aires.
Ese plantel había conseguido la Liga Sudamericana y fue parte del Open Mc Donald Championship jugado en Paris, en donde por un triple (89 a 86), quedaron afuera ante el Olympiacos de Grecia y no pudieron jugar la final contra los Chicago Bulls de Michael Jordan, ganadores del torneo. Los cordobeses le ganaron el partido al Paris Saint Germain por el tercer puesto por 88 a 78.
El último festejo de Atenas
Otro 24 de mayo pero de 2009, se dio la última gran alegría para el equipo más ganador de la historia del basquet nacional. Porque ese día, Atenas se consagraba campeón de la Liga Nacional y, como aquella vez en el Luna Park, también era dirigida por el indiscutido Rubén Magnano y el club estaba presidido por Felipe Lábaque.
La serie no fue tan sencilla pero fue ganada con mucha autoridad por el Verde a Peñarol de Mar del Plata por 4 a 2.
En ese equipo, que armaron la dirigencia y Magnano brillaron Bruno Lábaque desde la base, Juan Manuel Locatelli, Federico Ferrini, Andre Laws y Djibril Kanté como jugadores extranjeros. Pero, sin dudas, el jugador franquicia de ese equipo fue Leonardo Gutiérrez que venía, un año antes, de ser medalla de bronce de los Juegos Olímpicos de Beijing.
En las finales, que no fueron en el Cerutti sino en un estadio Orfeo en su esplendor, el Griego ganó 69 a 61 en el primer juego. Al segundo lo perdió por un claro 85 a 75. Tuvo su recuperación con el triunfo en Mar del Plata por 76 a 74.
Volvió a caer en el cuarto partido por 77 a 68 pero fue letal en los dos juegos posteriores ganando el quinto partido por 79 a 76 y, en el sexto juego, en el Polideportivo de Mar del Plata, el equipo cordobés se impuso por 91 a 83 y desató el festejo que llegó a Córdoba y fue el último de los verdes que esperan ansiosos su regreso a los primeros planos del basquet nacional e internacional.
Andrew Laws, que en la sexta final, fue goleador con 21 puntos también fue el MVP de la serie que ganó el Griego. Completaron el plantel: Bruno Lábaque, Juan Pablo Figueroa, Juan Cognini, Bruno Barovero, Juan Manuel Locatelli, Federico Ferrini, Cristian Romero, Leonardo Gutiérrez, Diego Osella, Djibril Kante, Pablo Orlietti, Mauro Abraham, Esteban Cantarutti, Joel Comba y Felipe Pais.
