Esta iniciativa que de seguro tendrá varios detractores, fue impulsada por la Asociación Inglesa de Fútbol y lo que busca es prohibir los cabezazos para evitar algún tipo daño neuronal.
Esto surge de un estudio llevado a cabo por la Universidad de Glasgow en el 2021, en el cual se realizaron pruebas a ex’s jugadores de Escocia, donde se llegó a la conclusión de los futbolistas tienen un 3,5 más de posibilidades de morir por una enfermedad neurodegenerativa que el promedio del resto de las personas.
La resistencia a jugar con la cabeza tuvo como fuente punto el fallecimiento de Nobby Stiles, jugador campeón de Inglaterra, quien padecía de demencia y murió en octubre del 2020 con 78 años, y cuyos análisis constataron que su cerebro fue progresivamente dañado por los golpeos de cabeza que realizó a lo largo de toda su carrera.
Otro de los casos influyentes fue el de Bromwich Albion, quien murió en 2002 y un forense determinó que se debió a un cabezazo.Y se suman mas sucesos de esta especie como el de Jack Charlton, quien falleció por enfermedades degenerativas, y el de Bobby Charlton que padecía demencia.
Con estos antecedentes, la preocupación por los daños cerebrales fue en aumento y derivó en esta medida que ahora fue probada por la Asociación Internacional de Fútbol (IFAB) y que comenzará sus pruebas en la categoría Sub 12 de Inglaterra.