Italia es hoy uno de los focos de COVID-19 debido a la cantidad de infectados y con más de 6 mil muertos en todo el país. “Se logró contener un poquito”, dijo el delantero.
“Acá en el sur crecieron los contagios porque mucha gente que estaba en el norte se vino acá para estar con la familia y trajeron el virus”, explicó López. “Ahora ya no se puede salir. Están tratando de contener al máximo el movimiento de la gente. En muchas provincias ya está el ejército en la calle”.
El argentino contó la despreocupación de la gente al comienzo y la severidad que hay hoy: “Al principio, mucha gente lo tomaba a la ligera. Salía a correr, estaba en la calle”, luego agregó “Se dieron cuenta de que no podían parar el virus y se decretó esta mañana que no se puede mover absolutamente nadie, solamente a las farmacias o a hacer las compras”.
“Ya no quiero ver más la tele. Es difícil”, dijo López. “Todos los hospitales están colapsados. Acá en el sur hay menos recursos. Hace 15 días que estoy encerrado. No es fácil. A los jugadores del equipo nos hacen las compras y las traen a casa, porque es una ciudad chiquita y hay facilidades”.
