De pibe jugando en Buenos Aires llegó el turno de ir a probarse a Lanús, pero cuando llegó no fue como lo esperaba.
Hoy es uno de los jugadores más pensantes y con mejor juego en Belgrano y tiene muy claro que el dialogo es primordial para encontrar el camino en un equipo.
A su vez analizó el momento Pirata hablando de los jugadores con más experiencias y voz de mando que le faltan:
También hubo momento para lo saludos y fue su ex compañero en Atlanta Abel Soriano quien tomo la posta y contó esta anécdota:
Mirá el programa completo: