Hace 50 años, Argentina volvía a paralizarse para seguir por radio o en la televisión, un combate por el título mundial de un boxeador nacido en el país. El santafesino Carlos Monzón desafiaba al campeón del Mundo de los medianos Giovanni Nino Benvenuti en el Palazzo dello Sport de Roma. Ambos boxeadores pesaron 72 kilos y medio en la balanza y todo estaba listo para el combate.
Ante más de 18 mil personas, el argentino dominó la pelea ante el italiano que, en los papeles, era el favorito.
Fue un trabajo de demolición de Monzón que hacía sentir las manos ante un rival que se confió antes y durante el combate. EL Escopeta, como le decían en su San Javier natal, era letal cada vez que se decidía atacar a Benvenuti.
El boxeador santafesino iba imponiendo condiciones con el correr de los asaltos y, en la previa al décimo segundo se escuchó a Amilcar Brusa, su entrenador, ordenarle que vaya por el nocaut porque veía que el italiano no respondía al castigo.
Y así fue. Una seguidilla de jabs de izquierda le permitió a Monzón quedar a la distancia justa para sacar el derechazo que tiró al rival para toda la cuenta.
Ese espectacular desenlace fue el comienzo de una carrera de campeón mundial de los medianos que duró 14 peleas hasta su retiro, en 1977, cuando le ganó por puntos al colombiano Rodrigo Valdez.
Ese 7 de noviembre de 1970 quedará para siempre enmarcado dentro de los grandes momentos de la historia del deporte argentino.
La definición de la pelea:
La pelea completa:
Documental sobre las peleas de Carlos Monzón:
