Barcelona FC goleaba por 4 a 0 al Cádiz de España y el partido estaba llegando a su fin, cuando en la tribuna se vivieron momentos de tensión por una persona que se descompenso y no la podía hacer reaccionar.
El reloj marcaba 82 minutos de juego cuando todo el estadio se paralizó para ayudar al hincha que estaba sufriendo una complicación de índole cardíaca.
Uno de los primeros en percatarse de la situación fue Jeremías Ledesma, el arquero arquero argentino hoy en Cádiz. Cuando el problema es del corazón un segundo puede hacer salvar una vida, y el argentino no dudo en ayudar, fue corriendo hasta el banco de suplentes para tomar el desfibrador y lanzarlo hasta ese sector de la cancha donde se intentaban auxiliar al fanático.
El arbitro Carlos Del Cerro Grande detuvo el partido para que los médicos asistieran a la hincha que se encontraba detrás del arco defendido por Ledesma, y el ambiente era de angustia total. A hinchas y jugadores como arquero alemán Marc-André ter Stegen y al defensor uruguayo Sergio Araujo, se los vió llorando y rezando por su salud.
El afectado fue trasladado hasta un centro médico donde finalmente se lo pudo estabilizar.