Por Ricky Vázquez:
Santiago de Chile se prepara para estar en los ojos de América en 2023 cuando en octubre sea sede de los juegos panamericanos. Llega de la edición realizada en Perú 2019 que fue justo antes de la pandemia y que dejó un sabor agridulce en cuestiones de organización sobre todo después de Toronto 2015 que había sido todo perfecto. Chile viene realizando un proceso que sueña en grande con pasos firmes y soñando cómo alguna vez lo hizo Rio de Janeiro con poder ser sede alguna vez de los juegos olímpicos.
En 2014 en el mismo lugar se desarrollaron los juegos Odesur (Sudamericanos) en un predio que rodea al estadio nacional de Santiago, muy similar al polo deportivo del Kempes, pero donde se invirtió mucho dinero en obras de infraestructura pensando en el futuro como un natatorio con los máximos estándares de calidad mundial y un polideportivo nuevo de gran tecnología. A eso se le suma el estadio de Tenis y otras disciplinas que se hacen en los alrededores del estadio lo que termina por generar una suerte de Parque Olímpico pensando en el futuro.
Incluso no se había logrado para el 2014 pero poco tiempo después se inauguró la estación de subte dentro del predio del estadio con lo cual se transforma en una de las vías más elegidas habitualmente en eventos multudinarios cómo un mundial o juegos olímpicos. En lo deportivo siempre sirve para medir el nivel con América y principalmente con potencias como Estados Unidos y Canadá que suelen ser países con importantes aspiraciones en los juegos olímpicos. De hecho, sobre todo Estados Unidos, muchas veces siquiera lleva por ejemplo en natación a los mejores exponentes y sus secundarios suelen estar cómodos en las finales.
Además, en los juegos panamericanos muchas disciplinas, habitualmente las menos populares pero no menos importantes, ponen en juego las plazas para los Juegos del 2014 que se realizarán en Francia. Tanto es así que por ejemplo en el Hockey y Handball son deportes de conjunto donde Argentina busca la clasificación. Lo mismo pasa con el tenis en caso de ser medalla de oro y tener un cierto ranking te aseguras el lugar en los Juegos Olímpicos como le pasó a Nadia Podoroska gracias a su oro en Lima 2019.
Los que no clasifican y lamentablemente le quitan importancia muchas veces a estos juegos, son los deportes más populares y que deciden hacer su propio negocio con un “torneo preolímpico”. Deportes como el fútbol, vóley y básquet lamentablemente no clasifican, pero en todos los casos ser consagrados con el Oro como les pasó a las tres selecciones en Perú no se lo quita nadie. Argentina habitualmente se hace fuerte en los deportes colectivos, pero siempre le cuesta en el famoso medallero porque las que festejamos con locura vale lo mismo que la de un atleta en una competencia que puede empezar y terminar el mismo día. Es justamente en las individualidades donde Argentina sufre con hacerse fuerte.