Por Luciano Migliazzo:
Pedro Miguel Faria Caixinha nació el 15 de noviembre de 1970 en Beja, Portugal. Durante su corta carrera como futbolista profesional se desempeñó como arquero y pasó por Portimonense Sporting Club y Clube Desportivo Beja, ambos clubes del ascenso de su país natal. A los 28 años decidió colgar los botines, en este caso los guantes, y comenzó su camino como director técnico.
Durante cuatro años fue entrenador de las categorías inferiores de Desportivo Beja, institución donde se retiró. Luego pasó al fútbol brasileño para sumarse al cuerpo técnico de José Peseiro en Vasco da Gama. Desde ese entonces, acompañó a su compatriota a cada club donde le tocó dirigir: Sporting Clube (Portugal), Al-Hilal (Arabia Saudita), Panathinaikos (Grecia) y Rapid Bucarest (Rumania). En 2009/2010 fue auxiliar de la selección mayor de Arabia Saudita.
Tras esta última experiencia se lanzó como entrenador y su primer club fue Uniao Deportiva de Leira, de la máxima categoría portuguesa. Allí logró un cuarto puesto histórico, solamente por detrás de Porto, Benfica y Sporting, los clubes más importantes de ese país.
Luego de su paso por Leira, Caixinha desembarcó en Clube Desportivo Nacional, donde consiguió ganar el Trofeo Ramón Carranza después de derrotar a Rayo Vallecano.
A fines de 2012, el portugués fichó por Santos Laguna, iniciando su exitoso camino en el fútbol mexicano. Durante su estadía en el club torreonense consiguió tres títulos: Copa México 2014, Torneo Clausura 2015 y Copa Campeón de Campeones 2014/2015. Además llevó a la institución a disputar la final de la Concachampions, donde cayó frente a Monterrey por un global 4 a 2 y también logró que los “Verdiblancos” clasifiquen a la Copa Libertadores 2014. Fue distinguido como el mejor entrenador de la primera división.
Caixinha se alejó de la institución en 2015 y tuvo pasos sin pena ni gloria por Al-Gharafa (Qatar), Rangers (Escocia) y Al-Shabab (Arabia Saudita). En el medio tuvo un regreso a México, pero esta vez en Cruz Azul, otro tradicional cuadro de esos lares. En la “Maquina Cementera” ganó la Copa México 2018 y la Supercopa 2018/19.
Luego de un segundo ciclo en Santos Laguna donde no pudo repetir sus logros de la primera etapa, el portugués de 51 años pica en punta para transformarse en el nuevo DT de Talleres. Si uno repasa su curriculum cumple con el requisito principal que exigía Fassi: la experiencia, puesto que sobrepasa los 150 partidos dirigidos en primera división que anhelaba el dirigente albiazul. Sin embargo, su falta de conocimiento sobre un fútbol tan complicado como el argentino genera algunas dudas entre los hinchas. En el mejor de los casos, podría imitar la histórica campaña del Cacique en Talleres, quién arribó a Córdoba en una situación similar a Caixinha. El tiempo dirá.
