Por Matías Candoli
Luego de que a fines de 2023 salió segundo en la tabla general anual de la Liga Profesional y de esa forma se asegurara un lugar en la Fase de Grupos de la Copa Libertadores, Talleres cambió. El cierre de la temporada no fue el mejor y eso le costó el puesto a Javier Gandolfi como entrenador. Luego de hablar con varios candidatos, el presidente Andrés Fassi y sus colaboradores le dieron el apoyo a Walter Ribonetto para que asuma frente al plantel que iba a empezar con cinco frentes: Copa de la Liga, Copa Libertadores, Copa Argentina, la Final de la Supercopa Internacional con River y el torneo de la Liga Profesional.
En la primera parte, y a falta de tres fechas para el final de la primera competencia, la T arrancó con dudas. La inexperiencia de Ribonetto, la falta de adaptación de los refuerzos, la clásica impaciencia de los hinchas y las exigencias autoimpuestas por la historia del club hicieron un combo que hizo difícil enderezar el rumbo.
Eso se logró, como casi siempre ocurre en el fútbol, a base de resultados. En los últimos partidos el equipo encadenó algunos triunfos y llega con chances de estar entre los mejores cuatro que pasarán a los cuartos de final. También se tiene en cuenta que, en el medio, se logró el objetivo de pasar de ronda en Copa Argentina ante Agropecuario que los clasificó a 16avos de final.
Así, luego del empate en cero ante Banfield, los albiazules quedaron en el cuarto lugar de la Zona A de la Copa de la Liga con 19 puntos, a dos de River, Argentinos Juniors y Vélez. Les falta jugar justamente ante los de Liniers y luego ante Independiente Rivadavia, ambos juegos en el estadio Mario Alberto Kempes. Y, en la última fecha, visitará a Independiente.
Agenda apretada para Talleres
En este parate por fecha Fifa, el equipo descansará para iniciar un raid de muchos partidos entre fines de marzo, principios de abril y se extenderá hasta mayo. Es que, la reanudación de la Copa de la Liga está prevista para el último fin de semana de marzo. Allí recibirá a Vélez. Luego, la T empezará la Copa Libertadores en donde jugará, el jueves 4 de abril ante el San Pablo en el Kempes. El domingo o lunes siguiente estará recibiendo a Independiente Rivadavia y el 10 de abril viajará a Ecuador para enfrentar a Barcelona, en Guayaquil. El 14 o 15 de abril estará cerrando su participación en Copa de la Liga visitando a Independiente en Avellaneda. Luego, si como se espera, clasifica a los cuartos de final, se verá cómo sigue la competencia local. En la Libertadores volverá a jugar el 25 de abril en Chile, ante Cobresal en lo que sería la primera rueda de fase de grupos de la Copa.
Aún así, con la agenda cargada entre lo internacional y lo local, el sueño de Talleres tiene fundamentos deportivos con rendimientos superlativos en lo ofensivo aunque deben ajustar un poco el funcionamiento en lo defensivo. Sólo en dos partidos de 12 jugados entre las dos competencias pudo terminar con la valla invicta. Sufrió 13 goles en contra En el resto, siempre recibió goles en contra. En cambio, a favor, marcó 23 tantos lo que marca, indiscutiblemente, el poderío ofensivo del equipo dirigido por Ribonetto.
Esos números con los que está actualmente el Albiazul permiten soñar. Es que, ajustando un poco lo defensivo y ratificando lo que se realiza en ataque con el paraguayo Ramón Sosa como estandarte, Rubén Botta manejando los tiempos de cada avance y con Federico Girotti terminando las jugadas en gol, los sueños de todo Talleres tienen fundamentos. Sólo el tiempo y el destino determinarán hasta dónde llegarán en lo que se viene.
