Leo Messi convirtió 697 goles en su carrera entre los cuales es muy difícil destacar uno por sobre el resto. Hay muchos que son muy recordados como el que arranco desde mitad de cancha ante el Getafe a lo “Maradona” o el que hizo ante el Bayern Munich dejando a Boateng desparramado en el piso. No nos cansamos de ver los grandes golazos que hizo Leo en toda sus carrera, desde tiros libres, picaditas hasta de “pechito” e incluso con la mano.
Sin embargo, aun teniendo cientos de goles en su haber, de todos los colores, Messi siempre adhiere a un gol que tuvo un efecto simbólico en su carrera. Fue el segundo tanto que Barcelona le anotó a Manchester United en el estadio Olímpico de Roma, en la final de la Champions League en 2009. No fue un clásico gol suyo. No eludió jugadores, no tiro un caño, no hizo una pared con Iniesta o Dani Alves. Increíblemente lo hizo de cabeza tras un gran salto, al recibir un pase perfecto de Xavi Hernández y con ese gol conquistaba por primera vez “La Orejona” como jugador titular y figura importante del equipo ya que anteriormente en 2006 ante el Arsenal, estaba lesionado.
Ayer, 27 de Mayo de 2020, se cumplieron 11 años de ese histórico gol de Messi que a pesar de no haber sido el mas vistoso, fue el más significativo en su carrera.
