Luego de sus problemas en el ojo que lo obligó a ir al hospital el sábado, este domingo fue a control de vuelta al sanatorio Otamendi.
Más allá de las suposiciones de una probable operación, Pérez no será operado y podía jugar el partido si es que se jugaba esta tarde.
El mismo jugador lo confirmó al salir del hospital en un auto particular cuando fue consultado.